Naturaleza
«Yo creo que para el niño, y para los padres que buscan guiarle, no es ni siquiera la mitad de importante conocer como sentir. Si los hechos son la semilla que más tarde producen el conocimiento y la sabiduría, entonces las emociones y las impresiones de los sentidos son la tierra fértil en la cual la semilla debe crecer. Los años de la infancia son el tiempo para preparar la tierra.»
Rachel Carson
La infancia es el momento de preparar la tierra. Crear un entorno, un clima adecuado. Nutrir, regar, proteger. Fomentar las emociones y las impresiones de los sentidos. Saber que la Naturaleza hará su trabajo despertando el crecimiento de los niños, sus ganas de ser y de aprender. Saber esperar. Ofrecer tiempo como un bien necesario para los procesos que rigen la vida. Así entendemos la docencia y la crianza en El Majuelo. La curiosidad y la alegría de vivir son capacidades innatas de la infancia. Nuestro principal objetivo es cuidarlas, ayudar a su desarrollo natural, intentar que se hagan fuertes para poder apoyar en ellas la formación de las pequeñas personas con las que trabajamos.








El Majuelo está ubicado a las afueras de Valladolid, en una antigua cañada por la que todavía pasan rebaños. El entorno que rodea nuestra escuela es de carácter rural: campos de cultivo, acequias de riego, arboledas, campas asilvestradas… Por eso, el conocimiento del entorno, uno de los objetivos constantes de la educación infantil, es para nosotros un acercamiento cotidiano a la Naturaleza y sus formas de vida. Nombres como la alameda, el pinar, la acequia o la cabaña de las moreras, son los que utilizamos como referencias para estructurar el amplísimo territorio por el que paseamos con nuestros alumnos y alumnas. La educación no debería quedarse encerrada entre las paredes de la escuela.